Merlina Ocampo y Azul Tuzinkevich, dos chicas marciales

La mayor parte de su día transcurre dentro de esas paredes. Ambas sienten el Sparring Center de Palermo como su segunda casa y disfrutan cada una de las intensas horas donde allí desempeñan distintas disciplinas. Merlina Ocampo y Azul Tuzinkevich se sientan en el ring como quien lo hace en el sillón de su hogar. Ahí, se disponen a comenzar la entrevista con Olé. Si bien tienen historias distintas y proyectan futuros dispares, las dos probaron los flashes de las cámaras y las artes marciales, y juran tener fanatismo por ambas. Merlina es la que más deportes desarrolló a lo largo de su vida, con experiencia en boxeo, muay thai, kick boxing y jiu jitsu. Su sueño, naturalmente después de haber probado todo esto, es convertirse en peleadora de MMA, algo que en nuestro país todavía escasea. Azul supo desempeñarse en el programa Combate, de Canal 9, donde jóvenes compiten en dos equipos (rojo y verde) en cada emisión. Allí coleccionó infinidad de seguidores y eso le permitió realizar muchas campañas de publicidad, pero afirma que practica artes marciales por puro amor y que su futuro está en la abogacía. Nada de TV. -¿Por qué se les fue dando por los deportes de combate? -MERLINA: Desde muy chica me gustaron los deportes de contacto y nunca me animaba a hacer ninguno por el hecho de que escuchaba a todo el mundo que decía que si sos mujer no podías hacerlo, o si sos linda tampoco. Hasta que un día me animé, empecé y fui por el lado de las artes marciales. Muay thai y Kick boxing son los que más me gustan, peleé ya dos veces, me gusta lo fuerte. Ahora varío con boxeo y jiu jitsu, que también es una buena disciplina. -AZUL: Vine acá a hacer crossfit, que es lo que me quedaba más cerca del trabajo, y vi que tenían artes marciales. Entonces dije voy a ver qué onda porque hace mucho tenía ganas pero yo hacía danza clásica, que no es muy compatible. Probé una clase y me encantó. Tenía miedo de golpearme, cortarme la cara o esas cosas que las mujeres le tenemos miedo pero nada que ver. Merlina y Azul posaron para Olé. -¿Cómo manejan el tema de los golpes y las marcas? -M: Es un tema, con el kick o el muay thai estuve a punto de tener fracturas de nariz o miedo que se me parta un diente. Por lo menos para mí es como que lo solucionaré cuando vea el golpe. -A: Claro, ya es como que te deja de importar. Querés luchar en el momento, aprender la técnica y listo, no te fijás en lo que puede pasar aunque después tengas que hacer fotos o lo que sea. -En el entrenamiento por ahí lo podés regular, ya en las peleas es imposible… -M: A mí me cuesta más en los entrenamientos porque siempre entreno con hombres. En boxeo hay muchas chicas, está lleno en Sparring, pero todas empezaron hace poco. Hago con hombres y a ellos les cuesta a veces pegarme y no da que me rocen. A: Y los hombres se enojan a veces, ja, son más calentones. No les gusta cuando les pegás. -¿Cómo es eso? -M: No les gusta nada cuando ven que vos les podés pegar, es como que les pegás en el orgullo, en el ego. -Peor que un no en un boliche… -A: Claro, más o menos, ja. Pero hay algunos que te ayudan un montón, más que nada en el jiu jitsu, ahí te tratan con más cuidado y hay más compañerismo. -M: Claro, en el muay thai es más individual. -¿Y ustedes perciben un poco que los hombres las subestiman a la hora de pelear? M: Siempre, a mí me pasa. Pero acá hay muy buena onda y el grupo es muy importante. Nos llevamos muy bien entre todos. A: En el jiu jitsu no, te respetan mucho, y el peso no tiene tanto que ver. Es bueno entrenar con ellos y especialmente acá por lo que se arma a nivel grupal. -¿Cómo era el entrenamiento mientras estabas grabando en Combate? A: Te exigían un mínimo que eran dos horas con el entrenador de ellos y después cada uno hacía lo que quería. Eso más el programa. No te quedaban muchas ganas de seguir entrenando. -¿Ahora cuánto entrenan? A: Tres horas por día, a veces tres turnos, depende mucho el día. M: Tengo boxeo todos los días hora y media y los días de jiu jitsu hago doble, dos horas y media. Todo el día, pero a mí me encanta. Mientras el cuerpo aguante... -¿Dieta? A: Tratás de comer bien, pero comemos todo lo que nos gusta. Para eso entrenamos tanto también. -¿Fuera de esto qué hacen? -M: Estudio educación física y trabajo en un estudio jurídico. Pero cuando me reciba voy para el lado del deporte. -A: Estudio abogacía y también trabajo en un estudio jurídico. A veces hago fotos pero mi meta es otra de lo que da la tele. Me quiero recibir y ejercer. -¿Sueñan con seguir con las artes marciales de forma profesional? -M: Quiero seguir peleando y hacer artes marciales mixtas, es un sueño lejano pero lo tengo presente, acá hay muy pocas mujeres que lo hagan. Ahí es a matar o morir. -A:Yo no, lo hago más por hobby. Me voy a dedicar a la abogacía. GENTILEZA DE DIARIO OLÉ.